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[Semanario de la UAM | 07•11•2016]

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SOCIEDAD

Irrelevante, el tipo de familia para

el bienestar en el hogar y la sociedad

Académica realiza estudio

sobre la violencia en el

que participan más de 800

adolescentes

L

as relaciones en la familia son priorita-

rias para mantener el bienestar en los

niveles individual y colectivo, sin embar-

go para garantizar esa condición no es deter-

minante si se trata de una tipo monoparental,

nuclear o de cualquier otro, puntualizó la doc-

tora Marisol Pérez Ramos, investigadora de la

Unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma

Metropolitana (UAM).

En la

Mesa: Comunidad y familia. Violencia en

la comunidad y su impacto en la vida familiar,

or-

ganizada dentro del

VIII Seminario internacional:

Diálogos con la psicología latinoamericana 2016,

la profesora del Departamento de Sociología

sostuvo que para la salud familiar y social no

es sobresaliente la estructura presente en casa,

pues resulta “más relevante el tipo de lazos in-

terpersonales establecidos”.

La docente del Área de Investigación

Procesos Psicosociales de los Fenómenos

Colectivos señaló que la sociedad mexicana vive

en un contexto de violencia en el que el nivel

de agresiones se eleva de manera constante y

expuso algunas conclusiones de la aplicación de

un modelo que explica este fenómeno en la co-

lonia El Molino, en el municipio de Ixtapaluca,

Estado de México.

El trabajo –realizado durante cinco años– se

basó en la teoría integracionista-ecológica que

considera los factores ambientales –físico-geo-

gráficos, culturales, sociales y económicos– así

como los psicológicos –cognitivos, fisiológicos y

afectivos– que aparezcan reflejados en la con-

ducta y las interacciones sociales.

La psicóloga social aclaró que el conflicto

intrafamiliar es presentado en forma preponde-

rante por la diferencia de opiniones personales,

pero el problema es que muy pocas veces se re-

suelve de un modo efectivo, por lo que se vuel-

ven vínculos de agresión que culminan en actos

de violencia.

Es importante observar en qué momento de

la convivencia, sobre todo entre padres y ado-

lescentes, aparece el conflicto y cómo detenerlo

para que no escale a situaciones mayores.

Pérez Ramos comentó que si existe maltrato

en la pareja, incluso desde el noviazgo, esa con-

dición quedará establecida también en la rela-

ción de familia; entonces, la violencia originada

en casa será reproducida en la escuela, donde al

final se registrarán conductas “antinómicas” que

acabarán afectando el entorno social.

Esto ocurre en entornos donde prevalecen

problemas económicos, políticos, sociales e

ideológicos serios, ocasionando que la agresión

sea más evidente y recalcitrante.

El estudio –realizado con 853 adolescentes de

edades promedio de 13 años, 52 por ciento mu-

jeres y 48 por ciento hombres– concluyó que es

“fundamental trabajar en el manejo emocional

desde la infancia, por las implicaciones para el

largo plazo en el establecimiento de las relacio-

nes interpersonales”.

También considera que el rechazo escolar

está conectado a conductas disociales en la

comunidad y que la violencia en el hogar es

reproducida, primero entre vecinos y luego en

el plano del barrio.

La investigadora estimó necesario generar

intervenciones psicosociales más profundas,

desde la formación de nuevas familias, el fo-

mento de la convivencia sana en el noviazgo y

la creación de estrategias de inclusión social en

las escuelas y el hogar.

Es fundamental el

manejo emocional

desde la infancia

para mejorar

las relaciones

interpersonales.