[Semanario de la UAM | 27•02•2017]
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CIENCIA
Alumnos de la UAM participarán
en la fase final del Concurso Hult Prize
El desarrollo podría
emplearse en refugios
para migrantes y sustituiría
la energía eléctrica
C
on el proyecto
Luminiscencia para todos,
un pigmento con capacidad energética
único en su tipo, un grupo multidiscipli-
nario de alumnos de la Unidad Azcapotzalco de
la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM)
participará en la fase final del concurso inter-
nacional Hult Prize, catalogado como el más
importante en el plano global en materia de
emprendimiento social.
La etapa final del certamen convocado por la
Hult International Business School será celebrada
del tres al cinco de marzo –de manera simultá-
nea– en San Francisco y Boston, Estados Unidos;
Londres, Gran Bretaña; Dubai, Dubai, y Shanghai,
China, con representantes de 650 instituciones de
educación superior, entre ellas ocho de México.
Los estudiantes de las licenciaturas en
Ingeniería Metalúrgica, Ingeniería Industrial, Inge-
niería Mecánica, Ingeniería Electrónica, Ingeniería
Ambiental y en Administración, Jairo David Mora-
les González, Daniel Isidoro Marín, Ramiro
Jiménez Habanero, Víctor Mayén Flores, Óscar
Arturo Bocanegra Jerónimo y Cristian Ernesto
Salazar Mendoza, en ese orden, acudirán ante un
jurado que evaluará la factibilidad de crear un em-
prendimiento que cumpla la meta de esta edición
del concurso: ayudar a personas refugiadas.
El eslogan del certamen –patrocinado ade-
más por la Fundación Clinton– fue
Reawekening
the human potential
y el objetivo es otorgar un
capital semilla –que ascendería a un millón de
dólares– al proyecto “capaz de producir empre-
sas sustentables y escalables que restauren los
derechos y la dignidad de diez millones de refu-
giados en el año 2022”, explicaron los jóvenes
en entrevista.
El proyecto tecnológico de los estudiantes de
la UAM consiste en el uso de tierras raras, ele-
mentos químicos que al aplicarles diversos pro-
cesos se convierten en un pigmento susceptible
de recibir el resplandor solar y transformarse en
energía y, por tanto, generar luminiscencia.
Los alumnos de la
Casa abierta al tiempo
dise-
ñaron un kit de ventanas, domos y puertas que al
recibir los rayos solares durante el día se recargan
y por la noche proporcionan luz fría, al mismo
tiempo que producen iluminación eléctrica.
Este colorante puede administrarse en super-
ficies plásticas de mochilas, botellas de vidrio o
pet, cristales, metales, madera y cemento, es
decir, tiene “una capacidad energética” transfe-
rida mediante “dispositivos ingeniosos” que ayu-
darían a las poblaciones de refugiados, precisó
Morales González.
Es un pigmento
para materiales
luminiscentes
único en su tipo
en México.