Retorno de la infancia
Una puerta fugaz.
Cae la sombra hasta el fondo
de la nube,
arcillas al lomo del espejo,
caen,
pregunta un ciego por su abrigo
de oscuridad y humo,
otro espejo distante
nos unirá,
dictaba el cascabel como recuerdo,
y piensa en el sombrero
que busca la elegancia
del sonido, dijo.
Así la infancia es el cajón,
la cama y el zapato viejo,
la arquitectura del ropero
que guarda el último cansancio.
Corriente línea tan morosa
donde eras niño hasta el extremo.
Queda lugar aún,
esa etapa de sueños
donde un rinoceronte
corta el tiempo.
Claridad
Del suelo encendido
podría despertar el polvo;
mil muertos insepultos gritarían.
Sin Dios y sin sedantes
algo falta.
Es mucha vuelta
para decir
humildemente
necesito amor.
Postal
Miramos la estación
de voces.
Un dominio de valles
nos arrastra;
seguimos en la infancia,
en patios
de la casa;
un parpadeo de Dios
y estamos lejos,
en otro suelo,
en otro tiempo
sin saberlo. |